El pueblo de Tepoztlán es conocido por sus hermosas vistas a la montaña, sus estrechas calles empedradas, su mercado semanal de artesanía y sus fiestas tradicionales. Una visita a esta ciudad es una buena idea para una escapada de fin de semana o una excursión de un día desde Ciudad de México. Tepoztlán se encuentra en el estado mexicano de Morelos, a 80 kilómetros al sur de la capital, y se puede llegar a ella en un tiempo de entre 90 minutos y dos horas, dependiendo del tráfico. Tepoztlán es un «Pueblo Mágico», un galardón otorgado por la Secretaría de Turismo de México que reconoce a determinados lugares por su belleza natural, riqueza cultural, tradiciones, folclore, importancia histórica, gastronomía, artesanía y gran hospitalidad.
Este es el mítico lugar de nacimiento de Quetzalcóatl, el dios azteca de la serpiente emplumada, y también alberga un pequeño yacimiento arqueológico azteca en la cima de una montaña cercana con un templo a Tepoztēcatl, el dios azteca del pulque, una bebida de agave fermentada. La ciudad tiene un aura mística que ha atraído a estudios de yoga y centros espirituales que ofrecen lecturas de tarot, limpiezas de aura, temazcales y otras terapias alternativas, además de las habituales clases de yoga y masajes.
Cosas que ver y hacer
Los visitantes de Tepoztlán disfrutan de hermosas vistas de las montañas, comida y cultura tradicionales, caminatas al sitio arqueológico en la cima del Monte Tepozteco, visitas a la histórica iglesia y monasterio del siglo XVI, y mucho más. Estas son algunas de las actividades más populares en Tepoztlán.
- Visita a la iglesia y antiguo convento de la Natividad: construidos entre 1555 y 1580, la iglesia y el antiguo convento fueron reconocidos por la UNESCO en 1994 como patrimonio cultural de la humanidad, junto con otros lugares religiosos de la región. El complejo consta de un gran atrio, una capilla abierta, capillas de posa (bóvedas cuadradas en cada una de las cuatro esquinas del patio) y la iglesia y el convento, que ahora alberga el museo local. La iglesia está dedicada a la Virgen de la Natividad. La fachada plateresca muestra a la Virgen María acompañada de Santo Domingo de Guzmán, fundador de la Orden de los Dominicos, junto a Santa Catalina de Siena. En el interior del monasterio hay numerosas pinturas murales originales.
- Subida a El Tepozteco: La extenuante subida a la zona arqueológica de El Tepozteco merece la pena por la naturaleza que se puede ver en el camino y por la espectacular vista desde la cima. El sitio incluye varias terrazas y una pirámide del siglo XIII que estaba dedicada a Ometochtli-Tepoztécatl. En su época de esplendor, este santuario atraía a peregrinos de toda Guatemala. El sendero sólo tiene algo más de un kilómetro y medio de longitud, pero es irregular y asciende más de 2.000 pies (la cumbre está a 7.500 pies sobre el nivel del mar). Este ascenso sólo debe ser realizado por visitantes en buena condición física. Es mejor hacer la subida por la mañana, antes del calor del día, llevar calzado cómodo y agua.
- Recorrer el mercado: todos los días de la semana hay puestos de comida callejera, productos y artesanía, pero los fines de semana el mercado se llena de excursionistas en busca de recuerdos. Elija entre cerámica finamente elaborada, esculturas de madera, calabazas decoradas, cestas y cuadros. Los miércoles son los mercados agrícolas y la mejor oportunidad para descubrir la gran variedad de ingredientes y platos que ofrece Tepoztlán.
- Visita el Museo de Arte Prehispánico Carlos Pellicer: Carlos Pellicer fue un poeta y buen amigo de la artista Frida Kahlo (fue el comisario original de su casa museo). Aunque era originario del estado de Tabasco, tenía en alta estima a Tepoztlán y decidió donar su colección de arte prehispánico a la ciudad en 1965. La colección se compone de más de 1.200 piezas e incluye piezas de las culturas maya, totonaca, mexica, teotihuacana, zapoteca y olmeca. El museo se encuentra en un antiguo granero del monasterio.
Qué comer y beber
Por supuesto, también hay restaurantes imprescindibles:
- Los Colorines está decorado con mucho colorido por dentro y por fuera y sirve sabrosos platos tradicionales. Las generosas raciones y el cálido servicio hacen que sea uno de los favoritos de visitantes y lugareños. Prueba la sopa de hongos o los chiles en nogada.
- El Ciruelo es un restaurante de lujo situado en una zona tranquila pero no lejos del centro de la ciudad. Siéntate en una mesa al aire libre con una magnífica vista de los acantilados de Tepoztlán.
- La Sombra de Sabina ofrece un buen café, un desayuno sencillo y una librería si buscas material de lectura.
- Para tomar una copa por la noche, le recomendamos que visite La Cueva, un bar al aire libre donde podrá degustar mezcal y tapas en un ambiente agradable.
Dónde vivir
Tepoztlán cuenta con una gran variedad de hoteles boutique, resorts de bienestar holístico, hostales y AirBnBs, tanto en la ciudad como en el hermoso entorno natural. Si es sensible al ruido, elija un lugar fuera del centro de la ciudad. He aquí algunos de los favoritos:
- El Hostal de la Luz-Spa Holistic Resort es ideal para los visitantes que buscan tranquilidad y rejuvenecimiento. Las habitaciones son acogedoras y ofrecen hermosas vistas de las montañas. Hay varias piscinas y bañeras de hidromasaje en los extensos terrenos. Disfruta de un tratamiento de spa o pasea por el laberinto del recinto mientras reflexionas en paz.
- Sitio Sagrado cuenta con amplias suites decoradas en suaves tonos tierra, cada una con una terraza privada. Hay una piscina climatizada, tumbonas para relajarse, un bar y aperitivos en las instalaciones. El hidrospa rinde homenaje al planeta y a los elementos esenciales de la vida, ofreciendo una variedad de masajes, tratamientos faciales y otros.
- El Hotel Tubo es un extravagante hotel económico con un toque ecológico. Las habitaciones de los huéspedes se encuentran en secciones de tubos de hormigón reciclado apilados unos sobre otros. Cada habitación cuenta con una lámpara de escritorio, un ventilador y una cama doble con espacio de almacenamiento bajo la cama. Los baños están separados y las gruesas tuberías de cemento proporcionan un aislamiento natural. La construcción única en medio de los árboles hace que sea una estancia memorable.
Consejos de viaje
- La fiesta del pueblo, conocida como La Fiesta del Tepozteco, se celebra el 8 de septiembre, día del nacimiento de la Virgen. Los festejos incluyen un ritual en el yacimiento arqueológico de la colina y diversas celebraciones en el atrio de la iglesia y en las calles de la ciudad.
- No hay que confundir Tepoztlán con Tepotzotlán, que también puede visitarse como excursión de un día desde Ciudad de México y que se encuentra en el Estado de México, a 40 kilómetros al noreste de Ciudad de México.
