La provincia de Tarragona es un destino turístico de ensueño, lleno de historia y rincones por descubrir. A lo largo de su territorio, encontramos una gran cantidad de castillos que nos transportan a otras épocas y nos invitan a conocer el patrimonio cultural de la zona. En este artículo vamos a descubrir algunos de los castillos más impresionantes de la provincia de Tarragona, y conoceremos un poco más sobre su historia y sus características arquitectónicas. Desde castillos medievales hasta fortalezas modernas, no te pierdas los espectaculares castillos en la provincia de Tarragona.
Castillos en Provincia de Tarragona
1. Castillo de Miravet
El Castillo de Miravet es sin duda un lugar impresionante, con unas vistas espectaculares tanto del Ebro como de la comarca en su totalidad. A pesar de que en algunos momentos el acceso puede ser complicado, merece la pena visitar este castillo, que tiene más ventajas que desventajas. Nosotros recomendamos ir en un día soleado para poder apreciar las excelentes vistas y, si es posible, hacer la visita con un guía, ya que esto permitirá comprender mejor toda la historia que hay detrás de este monumento y la importancia que tiene.
Hay que tener en cuenta que el Castillo de Miravet está en fase de recuperación, y a pesar de ello se trata de un gran patrimonio histórico que hay que descubrir. Aunque todavía queda mucho trabajo por hacer, esto no impide poder contemplar la esencia del castillo, su imponente muralla y las áreas que se han podido rehabilitar. También dispone de una tienda de souvenirs y libros históricos bien provista para aquellos que deseen llevarse un recuerdo de la visita.
Por otro lado, es cierto que algunos visitantes pueden sentirse decepcionados debido a que se espera más del castillo, ya que todavía quedan muchas partes que están por recuperar. Además, el precio de la entrada es un poco elevado en relación a lo que se puede ver dentro del monumento. Sin embargo, creemos que la visita vale la pena y sobre todo si se visita durante la mañana para aprovechar todo lo que puede ofrecer este increíble castillo.
2. Castell de la Santa Creu
El Castell de la Santa Creu es un castillo pequeño pero impresionante ubicado en Calafell. Una de las principales ventajas de este lugar es su accesibilidad, ya que cuenta con un amplio aparcamiento al lado y se puede visitar en menos de una hora. Además, los carteles informativos están disponibles en español, inglés y catalán, y también hay audio disponible para los visitantes. Al comienzo de la visita, proyectan un video interesante de cinco minutos sobre los orígenes del castillo. A pesar de ser pequeño, las vistas desde el castillo son excelentes y merecen la pena.
Una de las mejores experiencias que pudimos tener en nuestro viaje al Castell de la Santa Creu fue una visita guiada. Nuestra guía, Carme, era muy conocedora de la historia del castillo y su visita fue muy instructiva. Las vistas desde la fortaleza son espectaculares, y resulta muy recomendable para aquellos interesados en entender la historia del lugar donde te estás tostando la piel tomando el sol junto al mar de Calafell.
Aunque el lugar en sí es bonito y fácil de llegar, algo que nos dejó una sensación agridulce fue la falta de mantenimiento en ciertas áreas. El suelo estaba algo sucio y había bastantes colillas, y algunos de los carteles de información estaban viejos y un poco difíciles de leer. Sin embargo, a excepción de esto, todo lo demás estuvo bien. Las vistas hacia el mar desde la fortaleza son impresionantes y la chica de recepción fue muy amable y atenta. En general, nos quedamos con una buena impresión de nuestro viaje al Castell de la Santa Creu, y sin duda volveríamos a visitarlo.
3. Castell Monestir d’Escornalbou
Nos encantó visitar el Castell Monestir d’Escornalbou en nuestra reciente exploración de castillos en la provincia de Tarragona. Nos sorprendió gratamente la fusión de dos edificios medievales, el monasterio de San Miguel y el castillo, que han sido restaurados y transformados en una hermosa mansión señorial de principios del siglo XX. A pesar de que la planta superior de la vivienda de la familia Toda estaba cerrada por restauración, la visita guiada nos permitió comprender el lugar y su evolución de monasterio a residencia familiar. Y las vistas desde el lugar, simplemente espléndidas.
El castillo es un lugar impresionante en sí mismo, pero las vistas desde su ubicación en la cima hacen que la visita valga la pena el precio de la entrada. Además, la visita guiada permitió que apreciemos aún más la compleja historia que se esconde detrás de las ruinas restauradas. El propietario original, el diplomático, egiptólogo y filántropo Eduard Toda, hizo una interpretación muy personal desde su perspectiva histórica, que es fascinante. Aunque algunos podrían pensar que el lugar es más el resultado de esta interpretación que de su pasado histórico, la belleza del castillo restaurado con torres de estilo medieval y sus vistas desde el mirador-jardín lo hacen un gran destino.
Si bien la visita guiada es la mejor manera de explorar el castillo, también hay opciones para un paseo más casual. Pudimos disfrutar de las vistas desde lo alto simplemente mirando alrededor del pequeño mirador cerca del aparcamiento. Esto nos permitió contemplar la belleza del mar al fondo, lo que lo hace aún más sorprendente. Y por si fuera poco, es perfecto para los entusiastas del aire libre ya que hay mucho espacio para hacer senderismo, andar en bicicleta o incluso disfrutar de un picnic con mesas de comida disponibles. En resumen, el Castillo Monestir d’Escornalbou es un lugar que no deberías perder si visitas la provincia de Tarragona.
4. Suda de Tortosa
El Castillo de la Suda es uno de los destinos que no puedes perderte si visitas Tortosa. Además de ser uno de los monumentos más emblemáticos de la ciudad, ofrece vistas espectaculares del casco antiguo, la catedral y el río Ebro. A pesar de que su acceso es libre, se encuentra ubicado en el Parador de Turismo, por lo que el aparcamiento es muy cómodo. Sin embargo, la zona de los cañones del perímetro podría estar un poco más cuidada.
Una de las grandes ventajas de subir hasta el Castillo de la Suda es la oportunidad de conocer la historia y la cultura de Tortosa. En el recorrido se pueden observar las imponentes murallas que protegían la fortaleza y el cementerio islámico. La visita es interesante y educativa, y aunque actualmente el castillo está cerrado para visitas, se puede recorrer la muralla y disfrutar de vistas panorámicas impresionantes.
Si planeas tu visita en los meses de primavera o verano, te recomendamos hacer un paseo en barco por el Ebro para complementar tu experiencia. Sin embargo, si lo tuyo son las caminatas, subir al Castillo de la Suda en ruta circular es una buena opción para apreciar la ciudad desde diferentes perspectivas. En definitiva, es un lugar que nos encantó por ser un tesoro histórico y cultural de Tortosa.
5. Castell de Vilafortuny
Si estás buscando un lugar para celebrar algún evento especial, definitivamente te recomendamos el Castell de Vilafortuny. Nosotros celebramos la comunión de nuestros hijos allí y fue una experiencia increíble, ya que tanto el servicio como la comida fueron excelentes. Además, el lugar es precioso y la hospitalidad de su personal es excepcional, ¡lo pasamos genial!
Este castillo ubicado en medio de la nada se alza como un sitio peculiar que no te puedes perder. Su impresionante estado de conservación lo hace ver muy bonito. Y lo mejor de todo es que, a pesar de su antigüedad, sigue estando muy bien cuidado. Uno de los detalles más interesantes es que puedes rodear todo el castillo y sus jardines en un agradable paseo por debajo de la vía del tren en un puente, permitiéndote disfrutar plenamente del entorno.
Además de celebrar eventos, el Castell de Vilafortuny cuenta con un restaurante donde podrás degustar platos de excelente calidad en un entorno muy agradable. Es realmente sorprendente la profesionalidad y buen trato del personal del lugar, lo que lo hace aún más recomendable. Si bien no se puede visitar por dentro, el castillo permite disfrutar de la arquitectura y permite tomar fotografías que bien encuadradas, nos permiten transportarnos a otra época. Por lo que si buscas visitas de interés histórico para ir en familia, este es un lugar que no puedes dejar pasar.
6. Torre del Monje
Uno de los castillos impresionantes que visitamos en nuestra ruta por Tarragona fue la Torre del Monje. Esta torre, que forma parte del Circo Romano de la ciudad, fue construida entre los siglos XIII y XIV y se encuentra en una zona privilegiada de Tarragona, ofreciendo unas vistas espectaculares tanto de día como de noche. Además, su altura de 28 metros y su buen estado de conservación hacen que impresione a todos los visitantes.
Durante nuestra visita a la Torre del Monje, pudimos aprender sobre la historia del asentamiento tarraconense gracias a la guía audiovisual que se encuentra en pruebas. Esta guía nos permitió entender la importancia de esta torre y su ubicación en la antigua ciudad romana de Tarraco. Además, nos permitió ahorrar en la entrada, ya que existe una entrada combinada para cuatro recintos.
Otras de las ventajas de visitar la Torre del Monje es que se encuentra en una zona muy accesible, tanto desde el casco antiguo de la ciudad como desde la Rambla Vella o el Balcó del Mediterrani. Además, su entorno bien cuidado y la posibilidad de pasear por el jardín delante de la torre hacen que sea un lugar ideal para pasar un rato agradable.
Por último, destacar que la Torre del Monje es uno de los restos arqueológicos de Tarragona más fotografiados. Esto se debe, en parte, a su buena conservación y su majestuosidad, que la hacen imprescindible en cualquier visita a la ciudad. En resumen, la Torre del Monje es un castillo impresionante con una historia fascinante que merece la pena visitar.
7. Castell Del Comte De Sicart
«El Castell del Comte de Sicart es sin duda una opción curiosa y diferente a las típicas playas del área. Es un lugar cómodo e ideal para ir con niños, ya que puedes pasar un rato muy agradable en los jardines mientras paseas. Además, es perfecto para escapar del bullicio del día a día y disfrutar de un entorno más tranquilo y relajante.»
«Este castillo, antiguo palacete reconvertido, es ahora utilizado para usos culturales y exposiciones. La entrada es gratuita y puedes visitar tanto los jardines como el interior, que cuenta con varios salones, una prisión y caballerizas. Sin embargo, es importante tener en cuenta que se realiza un control de seguridad en la entrada donde se pide el DNI. A pesar de ello, es un lugar perfecto para los amantes de la historia y la arquitectura, destacándose sus vidrieras, chimeneas y su imponente torre del homenaje.»
«Descubrir las dependencias y jardines del Castell del Comte de Sicart es una experiencia muy interesante y recomendable para todos aquellos que visiten la provincia de Tarragona. Esta antigua construcción data originariamente del siglo XII, y después de varias remodelaciones y dueños, fue adquirido en 1989 por Isidre de Sicart I Torrents, quien le daría su nombre actual. Su transformación a estilo neogótico con influencias del norte y centro de Europa lo convierten en una construcción de gran belleza. Aunque es cierto que sus distintas modificaciones a lo largo del tiempo son evidentes en su estilo, lo que hace que parezca más del siglo XIX que del XII, presenta una belleza indudable. Sin duda, el Castell del Comte de Sicart es uno de los cinco castillos más impresionantes que se pueden visitar en la provincia de Tarragona.»
8. Castell d’Ulldecona
Nuestra visita al Castell d’Ulldecona fue una experiencia maravillosa. A pesar de que el castillo se encuentra en plenas obras, pudimos ingresar a diferentes estancias del lugar y disfrutar de una visita didáctica y bien explicada por el guía Paco. Además, tuvimos la suerte de ser parte del primer grupo en disfrutar de la visita virtual en la que pudimos ver como fue evolucionando el Castillo desde la edad del Hierro hasta la actualidad. Las gafas de la visita virtual son increíbles y realmente valen la pena.
El Castell d’Ulldecona es impresionante y puede imaginarse perfectamente la vida que llevaban las gentes que lo habitaban en cada época gracias a los distintos vestigios de construcciones superpuestas. Los expertos que te guían en la visita realizan una labor increíble en la descripción histórica del lugar. Cabe destacar que, aunque queda poca cosa del castillo original, el guía nos situó perfectamente en la historia de cada lugar y nos informó de todo lo que sucedió allí.
La vista desde el castillo es impresionante y desde arriba se divisa todo el pueblo de Ulldecona y Peñiscola a lo lejos. Lamentablemente, aunque el castillo en sí es muy chulo, los horarios de apertura son bastante restringidos y no pudimos visitar las torres y la iglesia, que se encuentran cerradas. Sin embargo, acceder a pie y recorrer las murallas y el patio es una experiencia única y muy recomendable en la zona. La visita guiada con Alex fue un acierto ya que es un gran comunicador y conocedor de la historia, brindándonos una experiencia inolvidable. Además, después de nuestra visita, pudimos disfrutar de una hermosa vista, en una excursión «ligera» y con buena digestión, justo después de comer en el restaurante L’Anti Moli.
En definitiva, el Castell d’Ulldecona nos dejó asombrados. Fue una experiencia única e inolvidable que cualquier amante de la historia debería tener. A pesar de las restricciones de visitas, pudimos disfrutar de una entrada emocionante a diferentes estancias y una visita y virtual única. Las vistas y la historia del lugar son increíbles y hay que experimentarlo personalmente. Un lugar que sin duda recomendamos para cualquier aventura de turismo en la provincia de Tarragona.
9. Milmanda Castle
Uno de los castillos más impresionantes que encontramos durante nuestro recorrido por Tarragona es Milmanda Castle. Esta casa fortificada, que antes fuera granja del Monasterio de Poblet, hoy en día pertenece a Vinos Torres y se encuentra en medio de un espectacular paisaje de viñedos que producen excelentes vinos elaborados por la Familia Torres. Lamentablemente, al tratarse de una propiedad privada, no tuvimos la oportunidad de visitar su interior, pero pudimos disfrutar del entorno privilegiado que rodea al edificio.
El castillo de Milmanda nos impresionó por su ubicación y la belleza de los paisajes que lo rodean. Situado en medio de viñedos, el pequeño castillo está formado por la torre del homenaje y el patio de armas, rodeado de pequeñas dependencias y amurallado. Aunque actualmente está cerrado para visitantes, pudimos disfrutar de su entorno, que es tan impresionante que vale la pena acercarse para disfrutar del ambiente en cualquier época del año.
El entorno de Milmanda Castle es ideal para recorrer en bicicleta en un día primaveral. Además, pudimos recorrer y perderse entre el verde y los caminos que rodean al castillo. También nos pareció muy interesante la explicación sobre la elaboración del vino de sus tierras y los métodos ecológicos que utiliza Vinos Torres. La entrada cuesta 3€ y se realiza por internet al club de bodegas Torres que es la actual propietaria de todo el complejo. Sin duda, una visita que recomendamos si te gusta el vino y la tranquilidad que brinda la naturaleza.
10. Castillo de Torredembarra
El Castillo de Torredembarra es una impresionante construcción de planta cuadrangular que se encuentra en el punto más alto de la ciudad. Actualmente, es la sede del Ayuntamiento. Aunque algunos usuarios no saben si se puede visitar el interior, otros sí tuvieron la oportunidad de hacerlo y quedaron encantados con la historia de este lugar. Sin embargo, el precio de la entrada puede ser algo elevado para algunos visitantes, aunque es un detalle que regalen sombreros con cada ticket.
Después de haber visitado el Castillo de Torredembarra, nuestra impresión es que se trata de un lugar muy interesante para conocer la historia de la zona. Nosotros, al igual que otros visitantes, pudimos disfrutar de una exposición de maquetas en el sótano y aprendimos sobre la importancia que ha tenido este lugar a lo largo de los siglos. También fue sorprendente ver cómo, a pesar de ser el Ayuntamiento, sigue conservando muchos de sus antiguos elementos arquitectónicos y tiene hermosas vistas a la ciudad.
A pesar de que algunos usuarios dicen que solo se puede visitar y no esperes grandes maravillas, creemos que es un lugar que merece la pena conocer en profundidad. La restauración y conservación del Castillo de Torredembarra es muy buena, y se ha convertido en una mezcla perfecta entre lo antiguo y lo nuevo. Es cierto que, al ser la sede del Ayuntamiento, no se puede acceder a todos los lugares que nos gustaría, pero la visita es completamente gratuita y, además, se puede disfrutar del patio del Ayuntamiento y algunos restos de piedra de antiguas tumbas en su interior.
Esperamos que este artículo sobre descubrir la historia a través de los majestuosos castillos de la provincia de Tarragona haya despertado en ti un gran interés. Nuestro objetivo es brindarte experiencias turísticas únicas e inolvidables. ¿Has visitado alguno de estos castillos o conoces algún otro en la zona? ¿Te gustaría saber más sobre la historia de la provincia de Tarragona y sus fascinantes fortalezas? No dudes en interactuar con nosotros en los comentarios o en nuestras redes sociales, estaremos encantados de compartir contigo nuestros conocimientos y anécdotas sobre estos increíbles destinos turísticos.
